jueves, 27 de marzo de 2008

Diseñando el Futuro (IV) Plan de acción.


Hola queridos Héroes. Algunos de ustedes me han escrito preguntándome acerca de la serie DISEÑANDO EL FUTURO. Bueno, para aquellos que han seguido la serie juiciosamente y también para aquellos que no, hoy viene la cuarta entrega de la serie con, quizá, uno de los post más importantes de la serie. EL PLAN DE ACCIÓN.

La acción es, en realidad el elemento más importante en la consecución del proyecto de vida. Frecuentemente en mis sesiones de coaching, encuentro una gran cantidad de hombres y mujeres que vienen con un plan perfecto, objetivos planteados de una manera adecuada, han identificado los recursos y comprenden muy bien su estado actual (elementos que hemos trabajado en los tres post anteriores de la serie) y en el momento en que les pregunto: "qué bien me parece tu planteamiento, cuéntame qué acciones has llevado a cabo para lograr este plan"; siempre hay dos respuestas con respecto a ello: unas veces no han llevado a cabo ninguna acción y, en otras ocasiones, las acciones que llevan están desordenadas y son poco coherentes con lo que se ha planteado. Y eso no está mal ni es un pecado, pero es un error en el que la mayoría de las veces caemos, empezar a actuar sin un plan. Afortunadamente hemos ya pensado en el plan en los anteriores post de esta serie; nuestro objetivo ahora es entender cómo hacer para que tu plan de acción sea coherente con tu proyecto de vida.

1. Diseñar tus objetivos. ¿Qué quieres lograr con esas acciones? Para saber qué acciones llevar a cabo debes saber qué quieres lograr.

2. El siguiente paso es investigar qué y cómo han hecho otros para lograr el mismo objetivo que estás persiguiendo. La mayoría de las veces los objetivos que queremos lograr son objetivos que otros han logrado. Así que lo más obvio para saber cómo alguien ha logrado algo es preguntárselo o leerlo en caso de que no sea alguien cercano a ti. Recuerda nuestro post sobre el modelado y entenderás este paso de mejor manera.

3. El tercer paso es diseñar un horario para organizar tus acciones. Si tienes como objetivo moldear tu cuerpo, debes saber qué días y a qué horas vas a ejercitarte; si quieres terminar un proyecto, dedícale el tiempo específico a dicho proyecto. Es importante que escribas tu horario y lo pongas en algún lugar visible, en el que puedas seguir tu plan de acción. Recuerda que la consecución de un objetivo es algo que debes hacer poco a poco, una meta conseguida significa que has logrado esa meta diaria que te pusiste en tu horario. Yo llegué cumplir el sueño de mejorar mis habilidades dibujando todas las noches: mi meta diaria era dibujar un personaje diario. Por último, esto te ayudará a predecir con más exactitud cuánto tiempo puedes durar para llegar a tu meta.

4. El último paso y tal vez el más importante es la creación de un medio para controlar tus avances. Es lo que los que hemos trabajado en ventas conocemos como CONTROLADORES. Cada objetivo que quieras alcanzar es susceptible de ser medido: si quieres mejorar tus relaciones interpersonales, anota cada semana cuántas veces te han dicho que tus relaciones han mejorado; si quieres mejorar tu apariencia, tomate fotos y guarda aquellas con las que te sientes bien; si quieres mejorar tus ventas anota todas las noches tus números específicos (cuántos clientes contactaste, cuantos te compraron, etc.). Tus controladores te ayudarán además a saber qué cosas están funcionando y qué otras no, te ayudará a encontrar tus fortalezas y tus debilidades.

Todos los objetivos son alcanzables, todas las habilidades son susceptibles de ser aprendidas, lo único que hace falta es el plan correcto.

Un saludo queridos Héroes.